¡Bordar es lo más! mi abuela, mi tía... eran modistas y se perdían día tras día entre sedas y organzas, recuerdo aquellas tardes cosiendo e imitando sus puntadas para novias e invitadas, un paraíso de amor por la aguja con pocas horas de descanso. Quien me iba a decir que seguiría sus pasos de otra forma pero con la esencia de quienes me criaron como madres.
Os presento esta hermosa cinta que confeccioné para la Comunión de Daniela, la hija de una amiga a la que quiero mucho. Lucio su cinta y junto a ella todo mi cariño.
Gracias Begoña, siempre dijiste que seria yo la que vistiera su cabeza y me hiciste muy feliz al elegirme. TQ
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